sábado, 14 de abril de 2012

Una sola noche

expr:id='"post-body-" + data:post.id' itemprop='description articleBody'>
Como cada mañana, tu dulce recuerdo permanece grabado a fuego en mi habitación, pues todo en ella se encuentra cubierto por ese dulce aroma que siempre te envuelve y que de alguna forma perdura entre mis sábanas.


Esta imagen no me pertenece
No sabría como describir el sabor de tus besos, tan ardientes pero tan apasionados, con los que con un ligero roce, todavía ácidos, todavía dulces, hacen que mi mente, mi cuerpo y mi alma se estremezcan sucumbiendo a deseos y sentimientos que jamás pensé que alguien pudiera llegar hacerme sentir.

Dicen que te has convertido en esa ilusión que trato de escribir en un papel, pero sé que en el surrealismo de la noche, el destino se nos presentó con un color ausente, siempre unidos por miradas tristes que se encontraban perdidas en una historia en la que la música comenzó a sonar a través de nuestros latidos.

Ahora, con un tenue susurro, grito junto a tu persona aquellas palabras que me fueron prohibidas, ignoradas y al tiempo desconocidas pero que siempre sonaron reales y deslumbrantes en tu persona.

Aunque sé que no hay vuelta atrás te juro compañero mío, que nuestras noches durarán para siempre, pues te has convertido en el  encantador de mis sueños mostrándote indomable, rebelde, apasionado, sediento, despreocupado  pero siempre tan vacío.

Ya no llores mi pequeña amiga, no te lamentes pues ya nada puede acabar con esta realidad.

Esta imagen no me pertenece
Te pido que me perdones por dejarme llevar,  pues aunque sé que juntas hemos respirado momentos oscuros de mi pasado, debes comprender que ahora mi futuro esconde miles de recovecos de felicidad.

¿Lo puedes sentir? De nuevo vuelvo a nacer y es en cada uno de mis tormentos cuando la electricidad de esos momentos recorre junto a él, las curvas de mis sentidos descubriendo de ese modo lugares inhóspitos de mí ser.

De nuevo vuelvo a sonreír.

Mis agonías se han convertidos en dulces oportunidades en las que mi alma, hoy fuera de pecado, me corrompen volviéndome indómita, rebelde, sedienta, despreocupada e independiente pudiendo sentir junto a su persona que el mundo que me envuelve se encuentra lleno de emociones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas Gracias por tu comentario