viernes, 5 de octubre de 2012

Escritos de un destino

expr:id='"post-body-" + data:post.id' itemprop='description articleBody'>
Esta imagen no me pertenece

El ruido de la muerte y el renacimiento conectaban con la fantasía y se hacían eco a través de Las Leyes del destino que desmoronan el tiempo.
Tiempo en el que todo el sufrimiento que sentí se fue abriendo paso a través de esta herida donde este pequeño corazón latente y ahora rasgado en mil pedazos, agonizaba lentamente, quedando de él recuerdos fragmentados de una joven desesperada, la cual había jugado peligrosamente a este juego llamado destino y que ahora con llantos de dolor derramaba miles de lágrimas doliéndole hasta el alma.
Ahora caminando por el sendero de mi destino, mi mirada refleja una triste agonía que sin saber cómo rompe con los límites de la soledad y hacen que me encuentre cara a cara con el mismo ángel caído.
¡Aquí me tienes!- le grito en la cara, pues sé que no encontraré luz en mi camino, camino que está teñido por este dolor que me consume y me quema lentamente.
Y mientras él me susurraba al oído palabras tenebrosas e insondables, mi alma se funde con el silencio de la oscura noche anhelando volver a ver algún día ese amanecer que un día alimentó mi vida con su dulce calor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas Gracias por tu comentario